Amasar la masa con todos los ingredientes.
A continuación, colóquelo en una fuente de horno engrasada durante 1 hora.
Doblar 3* masas cada hora. Empezamos a plegar la masa, hago una lámina como una masa de hojaldre con una ventana, luego la doblo como un sobre y la enrollo. Dejamos reposar durante 1 hora.
Volver a doblar, esta vez no tan grande, masajear con las yemas de los dedos, doblar y enrollar la masa. Dejar reposar de nuevo durante 1 hora.
Doblar la masa una última vez, yo uso una corteza de pétalos. Agarra la masa y tira de ella hacia arriba con pequeños movimientos, luego dóblala hacia el lado opuesto, dando vueltas en círculo, y al final, dale la vuelta a toda la masa. Dejar reposar en un lugar cálido durante unas 2 horas.
Sobre una superficie enharinada, extienda la masa hasta formar un rectángulo. A continuación, úntela con aceite de oliva y el relleno de tomate para pizza. Yo también rocío un poco de agua sobre la superficie. Doble los dos lados de la masa para que no se salga el relleno. A continuación, enróllala con cuidado.
Cortar en trozos de 2-3 cm y colocar en una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Pincélelos con una mezcla de 1 huevo y 1 sorbo de leche. A continuación, tápelos y déjelos levar durante unas 3-4 horas en un lugar cálido.
Precalentar el horno a 180°C en el programa de cocción de abajo arriba.
Cuando estén cocidas, pincélalas una vez más con la mezcla de huevo y leche.
Mételos en el horno y hornea durante 25-30 minutos hasta que los caracoles estén hechos.